Bin Laden: una captura oportuna martes, 3 de mayo de 2011















Dice Atilio Boron en una nota con la que no suscribo, salvo en este párrafo:

No deja también de llamar la atención lo oportuna que ha sido la muerte de Bin Laden. Cuando el incendio de la reseca pradera del mundo árabe desestabiliza un área de crucial importancia para la estrategia de dominación imperial, la noticia del asesinato de Bin Laden reinstala a Al Qaida en el centro del escenario. Si hay algo que a estas alturas es una verdad incontrovertible es que esas revueltas no responden a ninguna motivación religiosa. Sus causas, sus sujetos y sus formas de lucha son eminentemente seculares y en ninguna de ellas –desde Túnez hasta Egipto, pasando por Libia, Bahrein, Yemen, Siria y Jordania– el protagonismo recayó sobre la Hermandad Musulmana o en Al Qaida. El problema es el capitalismo y los devastadores efectos de las políticas neoliberales y los regímenes despóticos que aquél instaló en esos países y no las herejías de los “infieles” de Occidente. El fundamentalismo islámico, ausente como protagonista de las grandes movilizaciones del mundo árabe, aparece ahora en la primera plana de todos los diarios del mundo y su líder como un mártir del Islam asesinado a sangre fría por la soldadesca del líder de Occidente.

2 comentarios:

Polkiani dijo...

No entiendo porque no suscribis la nota. Podrias explicarte?

Fede / Billie dijo...

Me parece algo forzada, y poco feliz, la analogía entre la pretendida "guerra al terrorismo" de Bush-Obama y la dictadura militar argentina. En especial cuando Boron dice que

lo que se hizo fue abatir y “desaparecer” a una persona, presuntamente Bin Laden, siguiendo una práctica siniestra utilizada sobre todo por la dictadura genocida que asoló a la Argentina entre 1976 y 1983.

Boron es un tipo inteligente -tengo varios libros suyos, me parece lúcido- y justamente por eso espero de él un análisis más fino. La situación actual exige nuevas caracterizaciones, por ejemplo, cómo referirnos a un gobierno elegido democráticamente en una plutocracia bipartidista que, en un acto de venganza, remata a un terrorista que se adjudicó un atentado en territorio norteamericano. Soy tan crítico como Boron del "imperialismo" pero creo que la mejor manera de llevar adelante la denuncia es encontrar la especificidad de la situación actual y no el intentar encuadrar el hecho dentro de una lógica local, con pocos puntos de contacto.

Una aclaración final: que no suscriba no quiere decir que no sirva como provocación o que no pueda ser discutida. De hecho me alegra poder discutirla (otras columnas sobre el tema ni siquiera permiten eso).

Saludos