Caminito (al costado del mundo) miércoles, 7 de septiembre de 2005

En realidad no fue al costado del mundo. Es más: ni siquiera fuera de la ciudad. El caminito en cuestión se escribe con mayúsculas y debe ser una de las postales inequívocas de la ciudad en donde vivo.
Lo teníamos a sólo una hora y media de viaje, y hacía las veces de salida distinta que tanto esperábamos. No comimos ni tomamos nada (lo haríamos después, cerca de la Plaza Cortázar), simplemente caminamos el camino de caminito.
Una salida simpática y necesaria. La tranquilidad de sentirse lejos del encierro. Un día distinto.